martes, 13 de septiembre de 2016

Celos, cuernos y humillación

Mucho se ha hablado se habla y se hablará de los celos entre sumisos.

A mi me ha pasado, yo he sentido celos cuando mi Ama dedicaba su tiempo -y no solo su tiempo- a otros sumisos, en especial a uno que decía ser también su amante.

Yo me sentía muy mal sabiendome discriminado de esa manera. Además me sentía humillado pues me constaba que ambos, mi Ama y aquel buen sumiso lamedor tenían encuentros sexuales cuando yo ni siquiera había visto a mi Ama semidesnuda.

Eso me hacía sentirme mal, muy mal, y mi Ama recuerdo que en una ocasión me decía por whatssap "Ánda, vete y matate a pajas, pajillero, que yo me voy con mi sumiso lamedor que además es mi amante, jajajajaja", se reía.

Reconozco que yo me ponía colorado como un tomate e intentaba disimular tanta humillación demostrando un enfado que al final no era tal, si no un sentimiento real de sumisión, entrega, humillaación a la Dominante que me venía quizás grande o a trasmano en ese momento.

Pero reconozco que también me  proporcionaba esa situación una gran excitación.

Si no os lo he contado alguna vez con mi Ama muy a menudo acudían a mis sesiones una o dos Amas más, con lo cual podían ser dos o tres Amas las que me sesionaban.

Uno de los videos que más se acercan a mi situación en aquel momento es este que he enconttado en internet, en el que figuradamente bien podría ser yo, siendo azotado con un látigo por una de laas Dominas amiga de mi Ama, mientras mi Ama está sentada recibiendo un devoto cunilingus de su más fiel y mejor perro lamedor.

Real, real, real.