viernes, 28 de diciembre de 2012

Pajeándose en público... Morbo. Mucho morbo

Siempre me ha dado muchísimo morbo que me vieran mientras me pajeo. Quizás esa era la explicación por la que me gustase tanto de adolescente y no tan adolescente pajearme frente a la ventana a la vista de mis vecinitas de enfrente incluso de la gente que paseaba por la calle.

Efectivamente, daba la nota. De eso soy consciente algunos -bastantes- años después. Aunque nunca he perdido la oportunidad de, en algún lugar de visita, pernoctando en alguna otra ciudad o incluso en mi misma ciudad en una vivienda de alquiler, cualquier barrio muy populoso, para sacarme mi ridículo pene en estado de erección y mostrarme tal cual vine al mundo por mi ventana para deleite o divertimento de cualquier espectadora ocasional, y terminar corriéndome -como siempre sobre mi mano izquierda para no manchar nada- ante la atónita mirada de la espectadora de turno.

Todavía me dá mucho morbo recordarlo. También me dá mucho morbo una situación similar, en la que yo me exhibo desnudo ante desconocidos y desconocidas y procedo a masturbarme públicamente pero esta vez en plena calle (cosa por otra parte impensable en el país que vivo. O tal vez no), a la vista de todo el mundo.

Esto se puede ver en el siguiente video, en un ambiente consensuado pienso, pero que no por eso pierde todo su morbo. A mi me pone a mil, ¿Y a ustedes?


1 comentario:

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